martes, 18 de agosto de 2015

¡Por qué siempre!

Siempre lo mismo, la misma mala cuea, la misma necesidad de humillación del entorno. Parece que ando buscando lástima cuando en verdad lo que necesito es todo lo contrario. Es una verdad insondable que cuando un aspecto va bien en la vida, algún otro, necesariamente, tiene que estar en el infierno mismo. Ahora, cómo cresta lidiar con tanta estupidez que solo crece en la cabeza? Se pueden eliminar de raíz las autodestrucciones complejas que se forman vía neuronal y emocional? Es posible que esto cambie? Me he hecho esta pregunta por lo menos hace 10 años intentando sacarle tras vuelta y vuelta alguna pista, alguna señal que me lleve a poder resolverlo, pero al final es el mismo círculo asqueroso del eterno retorno.

No hay comentarios:

Publicar un comentario