Te me escapaste de entre mis cabellos como llama viva , siendo que como agua escurridiza te metiste hasta lo más profundo de mi mente . Ahora , ¿ cómo te saco? te convertiste en fugitivo de mi justicia , en un alienado de mi territorio . Y no hay tranquilizante , no hay droga que me quite el aliento y frescura de tus manos . Ya no hay recuerdos ni pensamientos futuros . Ahora. Ahora es cuando debo pensar en alguna receta para no olvidarte , de esas que mi abuela manejaba con tanta soltura .
No enciendas con fuego violento esto que me ha costado apagar , y te lo advierto: NO VUELVAS -porque ya yo no volveré más-, no vuelvas , no retrocedas sin que tu nuevo reloj te lo permita .
Minutos , segundos , milésimas de tiempo que me atosigan como el sonido de un taladro , lo siento resonar , lo siento atravesar este frágil corazón que ya en vidrio se ha convertido y que mi gemido ha oído mientras tú huías.
Hace tiempo que no hago pos-datas, es que ya no tengo a quien hacérselas, porque en verdad, a nadie le importan.
A mí me importan las posdatas :C
ResponderEliminar