Llenos de camotes
De llanos sin morada
De silencios terribles
Pero de amedrentar exquisito
Enemigos. Todo minuto enemigos
Con rencores a cuestas
Con desconfianza inversa
Con la clave siniestra
Que nos hace olvidar el mundo
Siempre enemigos
Aunque sin temores
Cada vez que nos mezclamos
El uno en el otro:
Enemigos todos, pero llenos de candores.
No hay comentarios:
Publicar un comentario